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Un
portal interestelar es una puerta a otros mundos que se abre y se conecta con dos
lugares distantes, separados por el espacio-tiempo. Funciona básicamente así;
se abre una ventana o puerta mágica fuera de la Tierra que sería el punto A y
otra cerca a Júpiter, por ejemplo, que sería el punto B que la nave atravesaría
y podría llegar de un punto a otro de manera instantánea o en tan sólo minutos.
Esto
en teoría se puede lograr en el mismo universo (teletransportándonos), con
mundos paralelos (portal interdimencional), hacia el pasado o futuro; incluso
en otro plano existencial. Debemos tener en cuenta que los portales son
similares al concepto que tenemos sobre los agujeros de gusano.
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Esencialmente,
los portales funcionan como los conocemos en los videojuegos o en series
televisivas de ciencia ficción como por ejemplos: El guardián de
la Eternidad en Star Trek,
en "La ciudad al Fin de la Eternidad"
de la misma serie; en la franquicia Stargate,
en la película Lost in Space, en ReBoot;
entre muchas otras producciones.
Los
avances tecnológicos de las últimas décadas y los del futuro harán que abrir un
portal interestelar hecho por el hombre, sea posible. Hay muchos astrofísicos
intentando crear un portal y dicen que técnicamente se pueden desarrollar para viajar
a otra estrella dentro de la vida de un humano.
El
fallecido científico británico Stephen Hawking, tenía como objetivo crear un
chip para ese propósito y aseguraba que esta fantasía se podría llevar a cabo
más pronto de lo que pensábamos.
Al
igual que Hawking; hay otros científicos y multimillonarios como Mark
Zuckerberg, Elon Musk y Bill Gates que creen que esto se puede hacer en un
futuro no muy lejano. A ellos se les unen los Emiratos Árabes Unidos, China,
Rusia, Estados Unidos y la comunidad europea.