El
Universo, según los científicos, tiene una extensión de más de 150 mil
millones de años luz y contiene 2 millones de millones de galaxias y
tan solo una de esas galaxias, como la Vía Láctea, es el hogar de 400
mil millones de estrellas.
De
acuerdo con ello, el Universo albergaría una cifra cercana o igual a los
cuatrillones de planetas, lo que por defecto nos indica que es imposible
que estemos solos en el cosmos si tenemos en cuenta que una de cada cinco
estrellas como nuestro Sol, alberga al menos un planeta parecido a la
Tierra.
EL CONCEPTO DE PLANETA
La
típica definición de planeta más sencilla es que, un planeta es un cuerpo
celeste que orbita alrededor de una estrella con suficiente masa y gravedad
para obtener una forma de esfera sin emitir luz propia, pero lo suficientemente
masivo como para tener un núcleo fundido en su interior.
¿CUÁNTOS TIPOS DE PLANETAS EXISTEN?
Debemos
tener en cuenta que llamamos planetas a los cuerpos celestes de nuestro
sistema solar y exoplanetas o planetas extrasolares a aquellos que se
localizan fuera de nuestro sistema solar.
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Aclarado
el punto anterior, los planetas del Universo se clasifican de acuerdo con su
tamaño, sus propiedades físicas y químicas. Aquí están los distintos planetas que existen.
PLANETAS ROCOSOS
Estos
planetas también se conocen como telúricos. Y como su nombre lo indica, los
planetas rocosos son aquellos cuya superficie es sólida como la de la Tierra
e igualmente poseen una alta densidad que por su masa son considerados mundos
pequeños.
En
un sistema solar cualquiera, los planetas rocosos son inmediatamente
identificables porque son los más cercanos a su estrella anfitriona y se
les llama planetas interiores.
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Estos
cuerpos celestes son, por lo general, de naturaleza rocosa y casi siempre contienen
una atmósfera densa con la capacidad; en algunos casos, de contener
agua líquida de acuerdo con la distancia respecto a su estrella.
GIGANTES GASEOSOS
Los
planetas gaseosos son cuerpos celestes de gran tamaño, compuestos
básicamente de gas exceptuando su núcleo. Estos planetas no tienen una
superficie rocosa y se les considera como estrellas fallidas con una
composición de 90% hidrógeno y helio.
Estos
planetas gigantes gaseosos, suelen tener discos de polvo a su alrededor y
muchos satélites (lunas) orbitándolos. Los planetas gaseosos no tienen
una superficie sólida como los planetas rocosos y al atravesar su atmósfera
se llegaría directamente a su núcleo.
De
hecho, los dos ejemplos más plausibles de un gigante gaseoso en nuestro sistema
solar son Júpiter y Saturno. Estos planetas son los más comunes del Universo
o tal vez por su gran tamaño son más fáciles de detectar.
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GIGANTES DE HIELO
Los
planetas gigantes de hielo solían confundirse con los gigantes gaseosos
porque son muy similares; pero la diferencia está en que su composición de
hidrógeno y helio es de tan solo un 10% y en los gigantes gaseosos es del
90% porque están formados por elementos más pesados.
Estos
cuerpos celestes, los gigantes de hielo, están a medio camino entre los
rocosos y los gaseosos. Un claro ejemplo y digno representante de esta
clasificación es Neptuno en nuestro sistema solar, al igual que Urano.
Debido
a su temperatura (-218 °C) que se encuentra por debajo del punto de congelación,
sus componentes como el amonio, agua y metano se solidifican, y su
estado de congelación es permanente.
PLANETAS ENANOS
Los
llamados planetas enanos se encuentran en esa frontera entre planeta del
tipo pequeño y los satélites como las lunas. Para entrar en esta categoría,
los planetas enanos deben orbitar alrededor de una estrella y no de otro
planeta.
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Estos
planetas enanos conservan una forma esférica y no emiten luz propia como los
demás planetas, pero por su pequeña mas no tienen la capacidad de “limpiar”
su órbita. Un claro ejemplo de ello es Plutón.
PLANETAS OCÉANICOS
Los
planetas oceánicos son aquellos que su superficie se encuentra cubierta de
agua o por debajo de ella. Nuestro planeta Tierra no entra en esta
categoría porque el agua en nuestro mundo solo alcanza el 71% de toda su extensión.
Estos
planetas oceánicos son considerados mundos rocosos y son muy parecidos a
nuestro hogar. Los planetas de este tipo son considerados por los
científicos como los pilares para la búsqueda de vida extraterrestre porque
ya cuenta con un elemento importante para albergar vida, el agua en su
superficie.
PLANETAS INTERESTELARES
Estos
planetas “vagabundos” recorren el Universo sin rumbo fijo durante
toda su vida. Estos cuerpos celestes, no giran alrededor de ninguna estrella
y son considerados por los científicos como un fenómeno extraño y poco común.
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Como
estos planetas interestelares no giran alrededor de ninguna estrella, son
mundos inhóspitos con temperaturas del cero absoluto y pueden ser rocosos, gaseosos,
enanos u otros.
ENANAS MARRONES
Los
planetas denominados enanas marrones, son aquellos cuerpos celestes que se
quedaron también a mitad de camino entre un gigante gaseoso y una estrella cuya
masa no es suficiente para que en su núcleo se inicie la fusión nuclear, pero
que estuvieron cerca de lograrlo. Además, también existen los llamados planetas calientes.
De
esta manera llegamos al final de este resumido e interesante artículo esperando
que haya sido de su agrado. ¿Qué te pareció? Deja tú comentario.
